Cita del mes


“El periodismo o es libre o es una farsa”

Rodolfo Walsh


viernes, 12 de julio de 2013

Cacerolazo del pueblo...


              
Esto lo publique hace algún tiempo en mi otro blog personal, pero quise compartirlo con mis lectores pichones de periodista, periodistas o simplemente interesados o afines pues es un tema que no puede callarse, por muy ajenos que seamos a esto nos termina revolcando hasta que involucra lo mas cercano a nosotros y nos toca hablar hasta ser oídos... Los venezolanos aun no somos oídos, aun no conseguimos lo que realmente pedimos y por eso esta entrada.


                Nunca me ha gustado hablar de política, yo soy la persona menos indicada para hablar de historia, no puedo negar que soy venezolana tengo muy mala memoria, pero resulta que todo este problema de 14 años sin medio para darse un gusto de verdad, viendo como Venezuela lentamente se volvía una Cuba sin que nadie pusiera un real “alto” me tiene enferma, a mí, a la persona menos indicada  para hablar de partidos políticos… hoy escribo lentamente, porque las manos me duelen de tanto quejarme del gobierno dedocratico que ha tomado poder por unos 6 años mas…

                Ayer un amigo me estaba diciendo que hacer escándalo con las cacerolas no sirve de absolutamente nada, que a nadie ayuda, que en nada cambia la situación del país, leí por internet varios estados donde decían que todo ese alboroto es querer llamar al odio, de igual forma leí que son las ganas de ir a joder, de sabotear… Leí que a muchos los atacaron y amedrentaron tanto de ida como de vuelta, leí que a otros les importo muy poco lo que haya pasado en las calles de Venezuela a las 8 de la noche de ayer…

                A mi parecer el cacerolazo es una protesta simbólica, recrea el sonido de los metales de cualquier cárcel, en lenguaje mundial es la queja contra los barrotes por la injusticia, el hambre, las promesas rotas, las ilusiones… es una forma de demostrarle a esos ciegos que dicen que somos unos pocos, que no son solo uno o dos pendejos, sino 7 millones de personas con el poder de elegir que no votaron por el candidato puesto a dedo en cada uno de sus cargos y que ahora en el más grande cargo, “heredado” como en la monarquía, fue puesto fraudulentamente.

                Como anda rodando por allí, “el que canta bingo muestra el cartón” ¿cuál es el miedo a la auditoria después de haber dicho en público que la aceptaría? Es obvio para cualquiera que el miedo está en que detrás de esta marioneta el titiritero se dio cuenta de su lengua suelta, le jalo las orejas porque sencillamente las boletas de votación dirían todo lo contrario a lo celebrado por “el corazón de la patria”, los oficialistas.

                Considero, y no soy la única en pensar, que en ambos bandos tenernos seres hostiles,  en ambos grupos hay personas de plata como personas del fondo del barrio, hay quienes pensaran que la única forma de acabar con el otro grupo es cometer actos ilícitos para inculparlos o jugar sucio de frente… pero entre las personas que aun conservamos la cordura dentro de este país de locos, de ambos partidos políticos repito, porque en ambos grupos hay personas y hechos tan ciertos como rescatables, esas personas que aun podemos hablar limpiamente de política somos las que debemos velar por la verdad porque mis queridos amigos y familiares oficialistas tienen que admitir que estas elecciones estuvieron bastante atropelladas, y limpias no fueron, la única oportunidad que tenían de hacer algo de frente y limpio lo echaron para atrás así que ni con todos los regalos y facilidades económicas que el gobierno les pueda dar esto no deja de oler tan mal como la carne podrida de “Pedeval.”

--/--Alisa--/--
Patricia Zapata
16/04/13